Desde hace unos cuantos años, 9 para ser exactos, se ha venido hablando constante y crecientemente del Bitcoin, una moneda virtual a la que se le han visto una serie de ventajas y que amenaza con crear un ecosistema alterno al sistema financiero tal y como lo conocemos hoy en día. Han surgido otras monedas virtuales (o criptomonedas) a partir de esta primera, con historias muy interesantes y exitosas, otras no tanto.
Sucede que el Bitcoin es solo una de un sinfín de aplicaciones de una tecnología sumamente interesante y con un futuro muy alentador que se denomina Blockchain y que tiene el potencial para modificar la forma en que hoy se ejecutan procesos clave de los ámbitos legales, económicos y políticos y así revolucionar industrias completas.
Las características que hacen innovador el concepto del Bitcoin residen en dos aspectos principales, el primero es la ausencia de una figura central y segundo, la disminución de los costos al ejecutar una transacción.
Bajo estas mismas características, transacción directamente entre las partes involucradas y disminución de costos, es que pueden desarrollarse más aplicaciones basándose en la tecnología Blockchain.
Por ejemplo, la implementación adecuada de Blockchain puede desarrollar una alternativa para establecer acuerdos contractuales, que prescinda de actores intermediarios; una amenaza real para los notarios y un escenario que permitiría llegar a acuerdos de manera más rápida y menos costosa, impulsando transacciones y/o acuerdos con actores que se encuentren en cualquier parte del mundo, confiando en la incorruptibilidad de la tecnología. Aquí está el potencial del Blockchain.
El Blockchain es en esencia un “registro maestro” distribuido y abierto que puede almacenar transacciones celebradas entre dos partes, de manera eficiente y verificable permanentemente.
El Blockchain trabaja sobre 5 principios básicos1:
1. Una base de datos distribuida.
Cada involucrado en una transacción de Blockchain, tiene acceso a la base de datos completa y a todo su historial. El control del Blockchain no puede ser tomado por alguna de las partes involucradas en la transacción.
2. Transmisión Peer-to-Peer.
La comunicación ocurre entre las partes involucradas, sin la necesidad de un ente central. Cada nodo almacena la información de la transacción envía la información a otros nodos, de tal manera que la base de datos se encuentra en diferentes puntos, de manera completa y prácticamente en el mismo momento.
3. Transparencia a través del uso de pseudónimos.
Cada transacción y su valor asociado son visibles a cualquiera que tenga acceso al sistema. Cada nodo o usuario en un Blockchain tiene una dirección alfanumérica de más de 30 caracteres que la identifica. El usuario tiene la alternativa de permanecer anónimo o proporcionar prueba de su identidad.
4. Registros irreversibles.
Los registros no pueden ser borrados una vez que fueron grabados, ya que éstos son referenciados a los registros que los preceden; de aquí el concepto de cadena (o eslabón).
5. Lógica computacional.
La naturaleza digital del “registro maestro” significa que las transacciones del Blockchain pueden ser operadas a través de lógica computacional y en esencia puedan ser programadas.
Adicional a estos principios, la tecnología de Blockchain es sumamente segura ya que utiliza criptografía de llave pública convencional para firmar digitalmente cada transacción con la llave privada del remitente y dirigirla a la llave pública de un destinatario. Los casos que se conocen en donde casas de cambio de Bitcoin han sido hackeadas, no han sido provocados por la debilidad de la tecnología de Blockchain, sino por tecnología utilizada en sistemas ligados a otras partes involucradas.
Ahora bien, aunque la base tecnológica se encuentra desarrollada y existen aplicaciones que ya se encuentran operando (el caso más evidente el de las criptomonedas), el desarrollar una nueva aplicación con base a Blockchain no necesariamente es fácil de implementar, ya que depende de la complejidad del ecosistema en donde se pretende incorporar, el número de actores involucrados y la facilidad para que pueda ser adoptado por los usuarios finales.
Cierto es que lo que hemos alcanzado a ver del potencial de Blockchain nos da un panorama alentador del impacto de esta tecnología en nuestra vida diaria, sin embargo, también es cierto que la maduración de esta tecnología y los impactos más profundos tardaran varios años más en llegar.
1 Iansiti, Marco y Lakhani Karim R., The truth about blockchain, Harvard Business Review, January- February 2017.
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